domingo, 28 de noviembre de 2010

La estela difuminada del rostro interno


"¿Crees que no lo entiendo? El sueño imposible de ser. No de parecer, sino de ser. Consciente en cada momento. Vigilante. Al mismo tiempo, el abismo entre lo que eres para los otros y para ti misma, el sentimiento de vértigo y el deseo constante de, al menos, estar expuesta, de ser analizada, diseccionada, quizás incluso aniquilada. Cada palabra una mentira, cada gesto una falsedad, cada sonrisa una mueca. ¿Suicidarse? ¡Oh, no! ¡Eso es horrible! Tú no harías eso. Pero puedes quedarte inmóvil y en silencio. Por lo menos así no mientes. Puedes encerrarte en ti misma, aislarte. Así no tendrás que desempeñar roles, ni poner caras ni falsos gestos. Piensas. Pero, ¿ves? La realidad es atravesada, tu escondite no es hermético. La vida se cuela por todas partes. Estás obligada a reaccionar. Nadie pregunta si es real o irreal, si tú eres verdadera o falsa. La pregunta sólo importa en el teatro. Y casi ni siquiera allí. Te entiendo, Elisabeth. Entiendo que estés en silencio, que estés inmóvil, que hayas situado esta falta de voluntad en un sistema fantástico. Te entiendo y te admiro. Creo que deberías mantener este papel hasta que se agote, hasta que deje de ser interesante. Entonces podrás dejarlo. Igual que poco a poco fuiste dejando los demás papeles."

Monólogo extraido de la película Persona de Ingmar Bergman

3 comentarios:

  1. te mudaste o pintaste la casa... paso de visita, me gusta el blanco, el contraste de las letras con el negro me hacía mal a la vista, me gustan las fotos y las cosas que pusiste por acá también

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  2. hay un nuevo
    aire en este sitio

    me da alegría

    ¿cómo andan esas cosas?
    ¿pudiste escribir sobre la foto del proyecto?
    ¿te extraño?

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  3. flo estoy haciendo el top, me falta recolectar más plumas :)

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